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El Salón de las Músicas Perdidas

Química

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Mi hermano llega agobiado para decirme que la vecina está sentada en el pasillo frente al ascensor, descalza. Mi padre está avisando a través de la terraza a la buena de nuestra vecina (esa señorina cuyo marido me despertaba por las noches, desde que falleció, una de sus hijas vive con ella) porque va a salir y quiere que alguien más salga, no vaya a ser que haya algún problema...

 

Mi padre es único para cubrirse las espaldas, pero es cierto que tampoco es algo tan raro o malo. No sabemos como puede reaccionar esta chica.

 

Lo que me aturde es el miedo que demuestran mi padre y mi hermano. Sobre todo cuando la señorina de al lado sale antes y empieza a hablar ocn la chica, y en su voz hay prudencia, si, pero no miedo. Lo que hay es ternura y lástima por ver a alguien en ese estado. Y mi aprecio por la señora aumenta a la vez que me desespera un poco ver el estado de ansiedad al que se autosometen mi padre y mi hermano... porque... joder, son mayores, han vivido más que yo... ¿realmente nunca se han visto en situaciones como esta? ¿No han conocido a nadie que estuviera mal, no les ha tocado de cerca el desarreglo mental? ¿Realmente han tenido tanta suerte de no tenerlo cerca nunca o es que lo han esquivado como si les fuer ala vida en ello, dando la espalda a las cosas, huyendo siempre? No puedo creer que con 28 años yo esté preocupado y algo nervioso pero en absoluto asustado y ellos estén como estén...

Me prohiben siquiera acercarme a la puerta, siguen temiendo que ella me haya cogido como "objetivo" de lo que sea. Así que entre mi padre y la señorina y la hija de la señorina intentan averiguar que le pasa a la chica, intentan que les de el número de teléfono de la madre aunque sea... pero es inútil. Ella dice no acordarse, dice que no puede explicar lo que le pasa, que siente que ese no es su sitio, que no tienen casa, que no debería estar ahí, que quiere ir a otra parte...que no la dejen sola.

 

En algún momento dado todos pensamos que podemos hacer una cosa, un acto, mejor de lo que lo están haciendo otros. Lo pensamos a veces o muy a menudo. Yo tengo la sensación de que podría haber hecho algo más que ellos por calmarla, por averiguar el teléfono. Lo pienso por experiencias pasadas, lo siento en las entrañas. Pero obedezco a lo que me han ordenado y espero. Tal vez ha sido un poco cobarde por mi parte, pero no tenía ninguna gana de que mi padre se pusiera a gritar/gritarme si lo intentaba.

Finalmente, han llamado a la policía. Poruqe nosotros no teníamos manera de averiguar donde y quienes son sus padres, porque mi padre se acercó al ambulatorio en mi calle pero allí le dijeron que ellos no podían hacer nada a menos uqe la policía lo pidiera o hubiera denuncia o la persona fuera voluntariamente. Y los policias tienen sus tablas, además que se tomaron su tiempo en venir, así que poco a poco han ido sacándole nombres, números... Y les ha costado, porque ella no quería ni entrar en su casa ni dejar que nadie entrara, les pedía con voz nerviosa uqe salieran por favor... tenía miedo de su casa, no quería estar en ella, ni que nadie estuviera. ¿Qué vería? ¿Qué le hizo soltar un grito y sacudirse algo que nadie veía de los brazos en cierto momento dado?

Y es todo química. La maldita y bendita química cerebral que nos permite recordar, sentir, manejar los impulsos voluntarios e involuntarios de nuestro cuerpo. Química y electricidad, eso somos, eso es nuestra cordura, nuestas sensaciones. A eso se reduce todo. Nuestra psique es química. ¿Nuestra voluntad también lo es? ¿Somos como somos porque alguien tiene una pizca mejor niveladas las dosis de sabediosque que rigen las conexiones en el interior de nuestro cerebro?

 

Ahora creo que han llegado sus padres. Sinceramente, espero que sea lo que sea, sea compensable. QUe haya algo que equilibre sus procesos. Porque a mi también me da una tremenda ver a algien consciente de que su cerebro no funciona como ella quiere, que los procesos normales, de vivir, sentir, amar, desear, llorar, anhelar, pensar, soñar... están todos enturbiados y formando espirales que no tienen sentido...

7 comentarios

Androgen a Patricia -

¿Y luego pretenden los psicólogos forjar una voluntad en doce sesiones? :)
Trabajo de titanes en el que probablemente hacen más las amistades y los amores que los profesionales :)

PEro bueno, yo también fuí una vez, no estoy para criticar nada :)

Un saludo

Androgen a sabbat -

Mi presencia suele ser habitual, aunque a veces no sepa que música dar a tus letras más que el silencio... y otras si sepa qué decir :)

Un abrazote

Androgen a Su -

Jeje, pues nada, que el jefe del sitio donde estoy de prácticas "amenazó" el otro día con contratarme cuando acabaran las prácticas... pero conociéndole es una cosa que dice hoy y mañana puede no acordarse.
En todo caso yo seguiré haciendo las prácticas lo mejor que pueda... y quien sabe, a lo mejor sigue pensando lo mismo allá por septiembre :)

Un besazo

Su -

¿Persona de provecho? oye, oye!!! no deberías dejar esa bomba en mi blog e irte como si tal cosa ;-)

¿¡¡qué significa eso?!?!? detalle, quiero.

Un beso

sabbat -

Qué risa recordándote contarme todo esto. Y hoy deberías pasarte especialmente por imaginate xD

Su -

Pasaba a saludarte, a darte los buenos días y a ponerme un poco al día, que la verdad llevo casi desde el jueves sin leer ;-)

Un abrazo

Patricia -

ufa!, te has cuestionado de golpe y porraso toda la Psicología en mayúsculas. Y yo, nobleza obliga, te diré que NONES; no todo es química. No solo. Ayuda y de lo lindo, pero la voluntad se forja, el aprendizaje es más que la genética, aunque haya casos imposibles, también. Mi profe de patología decía siempre: "no tengais miedo de la química ni de la neurofisiología, porque, despues o detrás de la dopamina...está el espíritu humano. Y si no que se lo digan a tu amiga la que si aprendió a convivir con sus desajustes químicos...ayudada por el Amor ;) Valor, eso es lo que nos diferencias. El valor. Besos.