Un recuerdo sencillo
¿Por qué me afectó tanto el 11-S?
¿Por qué lo recuerdo año tras año?
Fácil. Fue un momento, un día, en que coincidió la helada revelación de que estaba indefenso. Indefenso antes el dolor que viene de dentro e indefenso ante el dolor que viene de fuera.
Indefenso del corazón e indefenso del cuerpo.
Dicen que cuando uno es consciente de su propia mortalidad, es cuando se hace mayor y no en el buen sentido. Un niño deja de serlo al saber que puede morir, al ser consciente que va a morir.
Y ese día dejé yo atrás los pocos rastros de niño que me quedaban...
Por eso sigo recordando este día. Por eso... y por todo y por todos.
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